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Magistrado sabía que lo querían matar: denunció con nombres y apellidos

Minutos antes de salir de su casa y ser asesinado el lunes 13 de septiembre, el magistrado del Tribunal de Justicia Administrativa de Oaxaca, Enrique Pacheco Martínez, echó un último vistazo a una relatoría de hechos dirigida al fiscal del Estado, al congreso local y al Gobernador Alejandro Murat.


En la denuncia redactada entre el nueve y 10 de septiembre, Pacheco Martínez dejó constancia, con pruebas, de los sucesos que enmarcaron su ejecución. Es una historia detallada de las repetidas amenazas de muerte que le hicieron, según su testimonio, al menos tres personas.


En el escrito detalló el llamado tardío a las autoridades para que lo protegieran. Y anticipó que, sobre tres notarios públicos, un abogado y un periodista, pesan amenazas de muerte.


El abogado Enrique Pacheco acusó como autores de las amenazas de muerte en su contra al exsubprocurador de Oaxaca Enrique Toro Ferrer. a Aurelio Torres suegro del magistrado asesinado y líder gremial; y a Jesús Adrián Vázquez Ramírez, a quien identificó como sicario al servicio de toro Ferrer y que se hace llamar a Adrián Colmenares.


Excelsior obtuvo una copia del documento fechado el 13 de septiembre de 2021, día que fue asesinado el magistrado, antes de subir a su camioneta en la capital de Oaxaca, cometido, según las investigaciones, por dos personas que se disfrazaron como personal de limpia para no levantar sospechas de su objetivo.


En una parte del texto, el magistrado Pacheco Martínez mencionó una discusión con Aurelio Torres ocurrida a principios de septiembre: el motivo se centró en una disputa por la separación conyugal de Pacheco con la hija de Aurelio Torres Mayra Erika Torres Vázquez con quien se casó en 2014 en Los Ángeles California.


“La semana pasada alegué con él. Me expresó que si no le dejaba mi casa, un departamento en la ciudad de México y la mitad de mi salario a su hija así como una fuerte cantidad de dinero,él, Toro en complicidad con el señor (Juan José) Meixueiro (Orozco), me me iban a matar, esto más que todo constituye una peligrosa asociación delictuosa que me hace temer por mi vida y refuerza la creencia que el señor Toro y el señor Meixueiro tienen ya actividades poco decentes y que mi vida corre peligro porque mi suegro y Toro Ferrer son muy peligrosos”.


Fue extorsionado con 6 millones de pesos


El magistrado reconoció que él fue quien presentó a Toro Ferrer con su suegro. “Otro error muy grande que cometí “, escribió Pacheco y agregó: “ el señor Toro y el señor Torres entonces tuvieron relaciones poco legales ya que se empezaron a dedicar a “ hacer negocios “, cuando rompí con su hija Mayra Erika, el señor Torres comenzó a “ traerme “ supuestos “ mensajes “ amenazantes de Toro Ferrer “.


Pacheco Martínez preparó ese documento como parte de su estrategia para protegerse ante eventuales ataques en su contra; este intento de protección iba aparejada de una conferencia de prensa que planeaba ofrecer el lunes 20 de septiembre, donde también denunciaría los chantajes de toro Ferrer en su contra y que le habían costado 6 millones de pesos, que aseguró, se trataba de la herencia que le dejó su madre, Pilar Martínez. Además el magistrado asesinado expondría una cadena de falsificaciones de documentos gubernamentales y notariales realizados por Toro Ferrer para apropiarse ilegalmente de distintos terrenos en Oaxaca.


Excélsior también tiene copia de los seis recibos que en total suman 6 millones de pesos los cuales fueron entregados por Pacheco Martínez a Toro Ferrer entre el 7 de febrero y el 15 de junio de 2018 y que cuentan con la firma del subprocurador.


Toro Ferrer está en prisión preventiva desde el 7 de mayo de 2021, por una pugna por un desalojo en contra del caricaturista José Bolaños del periódico El Imparcial.


No es la primera vez que Toro es arrestado, en 1994 Toro Ferrer fue capturado junto con el colombiano Oscar Ovidio Macías Restrepo en posesión de 1 kg de cocaína pura y pasó seis años en la cárcel. Según el documento de Pacheco Martínez, desde la prisión de Etla, Toro Ferrer lo amenazó a través de un teléfono con clave de Guadalajara. “ Su amenaza consiste en que no debo denunciar los hechos que ahora denuncio, como se lo anticipé, porque me defraudó y me trató de vender predios a todas luces propiedad de otras personas, lo cual es un delito, por las falsificaciones, abusos, excesos y toda la gama de antisociales que representa“.


El sicario lo fue a visitar


La otra pista que dejó Pacheco Martínez sobre quién habría podido atentar contra su vida, es la supuesta relación de Toro Ferrer con el sicario, quien “es un señor que se hace pasar como Adrián Colmenares o bien, como en verdad se llama Jesús Adrián Velásquez Ramírez sujeto ligado al grupo de Catem, dirige una organización delictiva de tomateros que se instalan precisamente en los predios de triplay y está relacionado con el sindicato 3 de marzo del municipio de Oaxaca de Juárez, con las organizaciones delincuenciales de los tiraderos de basura y demás grupos facinerosos”.


“Por lo expresado por el señor Toro Ferrer y por las visitas intimidatorias de este señor Jesús Adrián me expresaron que si no colaboraba o los quemaba me van a matar, Sé que no es más que una amenaza para meterme miedo, pero desde este momento solicito medidas de seguridad para el caso de que pretendan atentar en contra de mi vida o la de mi familia”.


En las indagatorias por el asesinato de Pacheco se desprende que el magistrado Pacheco Martínez fue exhortado por gente cercana a él para que mantuviera perfil bajo mientras hacía público lo que hoy se conoce por este documento. Se conoció también la versión sobre que el magistrado asesinado habló por teléfono con su suegro. En esa llamada, Pacheco le anticipó a Torres sobre la denuncia legal y pública que haría sobre él, Toro Ferrer y Adrián Velásquez.


En su narración, Pacheco Martínez cuenta que Toro Ferrer se acercó a él años atrás, pidiéndole resolver distintos casos que él litigaba en el tribunal a cargo de Pacheco Martínez, a lo que aseguró el magistrado, se negó. Para presionarlo en sus demandas, Toro Ferrer argumentó ser abogado del ex gobernador José Murat Casab y del actual mandatario Alejandro Murat Hinojosa.


Toro decía ser abogado de Murat.


Según el documento de Pacheco Martínez, con esa mentira Toro Ferrer mantuvo su impunidad y se acercó a todo tipo de autoridades, registradores catastrales, jueces y fiscales, vendiéndoles la idea de qué era el abogado del padre del gobernador y que, de la misma manera, era abogado de confianza del señor gobernador y quien le manejaba sus asuntos especiales.


En el documento el magistrado asesinado, aceptó que permitió que Toro Ferrer lo chantajeara. El ex subprocurador Oaxaca le dijo a Pacheco, con supuestos números de expedientes, que la Secretaría de finanzas local tenía abiertas varias auditorías en su contra, pero que él se las podía solucionar.


Según la versión de Pacheco Martínez éste le entregó a Toro Ferrer la cantidad de 6 millones de pesos por concepto de honorarios, “cantidad que es limpia totalmente y que conforma la herencia que me dejó mi señora madre, que en paz descanse””. Después el Magistrado reclamó que “no era posible que fuera el abogado del señor gobernador y de su señor padre, porque me daba largas y largas para una supuesta entrevista con ambas honorables personalidades, anexo los recibos que me firmó por estos conceptos”.


Los conceptos de los pagos asentados en los recibos son los siguientes: Por servicios profesionales con el objeto de lograr un acercamiento político para conciliar las diferencias y asesoría de capacidad y relaciones públicas en el Estado y lograr la conciliación entre el licenciado Enrique Pacheco y los clientes que represento; por concertaciones parlamentarias, en mi carácter de Brocker, para conciliar los intereses de mi cliente el licenciado Martínez, con los actores políticos del Estado, a efectos de lograr las conciliaciones correspondientes y no sea removido de su puesto; por concertaciones en la ciudad de México, en mi carácter de representante legal, para que el señor licenciado Enrique Pacheco Martínez no sea auditado por el gobierno del Estado, y solucionar sus problemas personales que tiene con los personajes políticos del mismo Estado; por honorarios, a efecto de qué con este recibo se suma la cantidad de 6 millones de pesos, haciendo constar que por intervención de Enrique Toro Ferrer el señor Enrique Pacheco Martínez no fue separado del cargo que ostenta y se frenaron las auditorías que se ordenaron en su contra.


Pacheco Martínez afirmó en su documento que se enteró que Toro Ferrer había construido un hotel en Puerto Escondido con los 6 millones que le había entregado, despojando a gente de lugar, haciendo valer su supuesta cercanía con la familia Murat.


El magistrado asesinado explicó en su denuncia que volvió a caer en los engaños de Toro Ferrer, cuando al reclamarle la devolución de sus 6 millones de pesos, aceptó que Toro Ferrer escriturara a su nombre 5 hectáreas de un predio en Puerto Escondido, conocido como punta colorada y que en realidad era un terreno expropiado por el Gobierno federal, que Toro Ferrer se había apropiado, al menos con papeles falsos, de los que se tienen copia.


También denunció Pacheco Martínez que Toro Toro Ferrer y su sicario Adrián Valenzuela tienen una lista negra de personas que corren serio peligro. En la lista están los notarios, Jorge Gómez Merlo, Alejandro José Vidaña Luna, Arturo David Vázquez Urdiales; además del caricaturista de El Imparcial de Oaxaca José Bolaños.


Con información de Excélsior


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